Florece como esta rebelión,
como nuestros pasos.
Florece como tu mirada en el horizonte
tus ojos impenetrables,
inalcanzables,
lejanos de mi,
de tu ausencia,
de tu presencia ausente
en mi alma
y a la vez...
construis con otros,
cuanto les dejas
tus palabras
tan fuertes,
tan claras
y elocuentes.
Tus escapadas,pero queriendo estar con nosotros,
no te querías ir,
pero la buscabas a ella.
Dirían revolución hormonal,
revolución de las mentes
de nuestra organización.
No nos vieron capaces
hasta nuestros propios compañeros,
no creyeron en nuestras decisiones,
en nuestras acciones.
¿Y vos?
vos,ahí,latente,
como esta herida,
que no para de sangrar.
Si,latente,
en cada uno de nosotros
siempre ahí,presente.
Y otra vez,
tu cuerpo
deseándote
en tanta convulsión
y soledad.
como nuestros pasos.
Florece como tu mirada en el horizonte
tus ojos impenetrables,
inalcanzables,
lejanos de mi,
de tu ausencia,
de tu presencia ausente
en mi alma
y a la vez...
construis con otros,
cuanto les dejas
tus palabras
tan fuertes,
tan claras
y elocuentes.
Tus escapadas,pero queriendo estar con nosotros,
no te querías ir,
pero la buscabas a ella.
Dirían revolución hormonal,
revolución de las mentes
de nuestra organización.
No nos vieron capaces
hasta nuestros propios compañeros,
no creyeron en nuestras decisiones,
en nuestras acciones.
¿Y vos?
vos,ahí,latente,
como esta herida,
que no para de sangrar.
Si,latente,
en cada uno de nosotros
siempre ahí,presente.
Y otra vez,
tu cuerpo
deseándote
en tanta convulsión
y soledad.